En respuesta a la devastación causada por el huracán Otis en zonas costeras del estado Guerrero, el Banco de México (Banxico) ha instado a las empresas financieras del país a brindar apoyo a los damnificados. La entidad emitió una sugerencia a los prestamistas para que tomen medidas temporales, entre ellas la suspensión de pagos mínimos en tarjetas de crédito de clientes afectados, con el objetivo de aliviar su carga financiera en medio de la crisis.
El huracán Otis, que azotó la semana pasada, dejó a su paso no solo pérdidas humanas, sino también daños económicos estimados en cerca de 16,000 millones de dólares. Ante esta situación, el gobierno de México anunció el miércoles un plan de apoyo por aproximadamente 61,300 millones de pesos (alrededor de 3,425 millones de dólares) destinados a la reconstrucción de Acapulco y las áreas circundantes afectadas por el desastre natural.
Banxico ha recomendado que estas medidas de apoyo, como la suspensión de pagos mínimos en tarjetas de crédito, se implementen de manera temporal y se mantengan vigentes hasta abril. Además, el banco central ha enfatizado la importancia de que las empresas financieras proporcionen información clara y transparente a sus clientes sobre los términos y condiciones de estos beneficios.
Esta iniciativa tiene como objetivo aliviar la carga financiera de los afectados por el huracán Otis, permitiéndoles enfrentar los desafíos económicos derivados de la catástrofe natural. La colaboración entre el sector financiero y el gobierno se presenta como un paso crucial para ayudar a las comunidades damnificadas a recuperarse y reconstruir tras la devastación dejada por el huracán en la costa del Pacífico mexicano.