La gobernadora de Nueva York ha anunciado un nuevo plan para reactivar el cobro de congestión vehicular en Manhattan. Esta medida, que se aplicará a los conductores que ingresen a las áreas más concurridas de la ciudad, tiene como objetivo reducir el tráfico y mejorar la calidad del aire en la región. El cargo por ingresar a estas zonas será de 9 dólares, buscando desincentivar el uso de vehículos particulares y promover el transporte público.
El programa de cobro por congestión se ha implementado con éxito en otras ciudades como Londres y Estocolmo, generando ingresos que se destinan a mejorar las redes de transporte. En el caso de Nueva York, los fondos recaudados se utilizarán para mejorar la infraestructura del sistema de metro y transporte público en general, beneficiando a millones de usuarios.
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