Ciudad de México.– Con el banderazo de salida por parte del Gobierno de México, inició la construcción del Tren Querétaro-Irapuato, una obra ferroviaria que promete transformar la movilidad en el Bajío y beneficiar a más de 2 millones de personas, además de generar cerca de 10 mil empleos.
El proyecto contempla una extensión de 108.20 kilómetros, con estaciones en Querétaro, Apaseo el Grande, Celaya, Cortazar/Villagrán, Salamanca e Irapuato. La primera etapa en construcción corresponde a un tramo de 30.3 km de Querétaro a Apaseo el Grande, con una demanda estimada de 30 mil pasajeros diarios hacia la Ciudad de México.
La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo destacó que este proyecto forma parte de la recuperación del transporte ferroviario de pasajeros en el país, señalando que la Cuarta Transformación ha devuelto la visión de un México conectado por trenes.
Los trenes que recorrerán esta ruta alcanzarán velocidades de hasta 200 km/h, lo que permitirá reducir tiempos de traslado y abrir la posibilidad de extender la conexión hacia Guadalajara, fortaleciendo la conectividad con el occidente del país.
La gobernadora de Guanajuato, Libia Dennise García Muñoz Ledo, subrayó que los trenes son sinónimo de progreso y unión familiar, mientras que el gobernador de Querétaro, Mauricio Kuri González, afirmó que el proyecto dará un fuerte impulso a la competitividad y el desarrollo económico de la región.
Con pasos superiores, puentes y obras de drenaje incluidos en su infraestructura, el Tren Querétaro-Irapuato se perfila como una de las obras estratégicas de la administración federal para consolidar la movilidad y el crecimiento económico del Bajío.
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