Las Vegas, Nevada. – La historia del boxeo sumó un nuevo capítulo con la victoria de Terence “Bud” Crawford sobre Saúl “Canelo” Álvarez, en un combate que se convirtió en uno de los más esperados del año.
Crawford (42-0, 31 KOs) hizo gala de su velocidad y precisión para imponerse por decisión unánime al mexicano, arrebatándole los cuatro cinturones de peso supermediano (AMB, CMB, FIB y OMB). Las tarjetas marcaron 116-112, 115-113 y 115-113, reflejando el dominio del estadounidense a lo largo de los 12 asaltos.
Con este triunfo, el peleador de Omaha se convirtió en el primer boxeador masculino en la historia moderna en ser indiscutido en tres divisiones: superligero, welter y ahora supermediano. Un logro que lo coloca junto a leyendas como Henry Armstrong y la campeona Claressa Shields, quienes alcanzaron hazañas similares en épocas distintas.
Tras la pelea, Crawford reconoció la grandeza de su rival:
“Canelo es un gran campeón y muy competitivo. Soy fan de él y peleó como un verdadero campeón”, declaró emocionado.
Por su parte, el tapatío Álvarez (63-3-2, 39 KOs) aceptó la derrota con humildad:
“Una derrota no me define. Vine a la vida a tomar riesgos y a ponerme a prueba. Aquí seguiré y si se da una revancha, será especial”, expresó.
Un combate histórico
El evento fue copromocionado por Riyadh Season, de Turki Alalshikh, y marcó el debut de Zuffa Boxing, la nueva apuesta de Dana White bajo la marca TKO. El duelo reunió a dos de los mejores libra por libra del mundo: Crawford, actualmente tercero en el ranking de ESPN, y Canelo, sexto.
La pelea confirma a Crawford como uno de los grandes nombres del boxeo contemporáneo, mientras que Álvarez reafirma su lugar como figura indiscutible de la última década, incluso en la derrota.
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