En la sesión más reciente del Congreso del Estado de Chihuahua, las diputadas pertenecientes al Grupo Parlamentario del Partido Acción Nacional (PAN) han alzado su voz contra lo que consideran una serie de ataques injustificados y politizados hacia la gobernadora del estado, provenientes, según sus acusaciones, de la bancada de Morena. Este enfrentamiento político ha alcanzado niveles más allá de la mera discrepancia ideológica, siendo acusado por las legisladoras panistas de constituir violencia política en razón de género.
Geo Bujanda, una de las legisladoras del PAN, ha señalado la manipulación de datos estadísticos relacionados con la corrupción en Chihuahua, argumentando que estos datos se utilizan como armas políticas sin fundamento alguno. Bujanda ha destacado la doble moral en el tratamiento de las acusaciones de corrupción, comparando la actitud hacia el gobierno estatal con las relacionadas con el gobierno federal y los familiares del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Por otro lado, Isela Martínez ha abordado específicamente el tema de la violencia política de género, denunciando la manera en que se deslegitima el trabajo de las mujeres en la política mediante críticas basadas en prejuicios sexistas. Martínez ha rechazado enérgicamente la descalificación hacia la gobernadora por su relación personal, destacando la necesidad de reconocer la capacidad de las mujeres para ejercer cargos de alto nivel de manera autónoma y competente.
Carla Rivas, otra de las diputadas del PAN, ha salido en defensa de la gestión estatal frente a las acusaciones de corrupción y mal manejo, atribuyéndolas a estrategias políticas de Morena para dañar la imagen de la gobernadora y del PAN. Rivas ha destacado los logros económicos y de gestión del estado de Chihuahua bajo la administración panista, subrayando la falta de apoyo y reconocimiento por parte del gobierno federal.
En última instancia, las diputadas del PAN han hecho un llamado a la unidad y al trabajo conjunto para enfrentar los desafíos del estado, instando a todas las partes a adoptar una postura constructiva y respetuosa. Además, han enfatizado la importancia de reconocer y combatir la violencia política de género en el ámbito político estatal.
La situación política en Chihuahua se encuentra en un momento de alta tensión, con acusaciones cruzadas y un llamado a la reflexión sobre el trato hacia las mujeres en la política. Para más información y actualizaciones sobre esta situación, se recomienda seguir a «Soy Chihuahua».
